NO TE QUEDES CALLADO

NO TE QUEDES CALLADO

viernes, 8 de abril de 2011

PRACTICAS COMUNES

MOCHILA

Aprovechando un momentáneo descuido de la víctima su mochila le es sustraída, y vaciada de su contenido. La mochila es entonces vuelta del revés, y su contenido se vuelve a introducir. Cerrada y devuelta a su lugar original,[1] la mochila presenta una apariencia peculiar. El propietario de la mochila sólo tiene una manera de volverla a su estado original, y es vaciándola de nuevo de todo su contenido, entre el lógico regocijo general. Esta broma puede hacerse también con el estuche de algún alumno. Si, por ejemplo, la víctima abandona la clase por algún motivo, no sólo su mochila, sino también su estuche -y cualquier objeto reversible que tenga sobre la mesa- pasará por el mismo proceso.



PISOTONES
Estos ejercicios se ven favorecidos por la formación de filas, típicas en los desplazamientos de escolares. Se puede pisar el talón de la víctima, causando eventualmente su caída. Otra variedad consiste en pisar la parte lateral de sus zapatos, de modo que el ritmo natural del caminar hará que al levantar el pie el zapato quede sobre el suelo. Una última variante consiste en patear enérgicamente el talón de la víctima para desequilibrarle o simplemente molestar.[1] El carácter anecdótico de estos percances facilita su justificación accidental.

CARTELES
Una nota -típicamente, "tonto"- se cuelga a la espalda de la inadvertida víctima. Se suelen utilizar adhesivos que garanticen la repetición de la broma.[1]
Esta clásica broma consiste en atar los cordones de los zapatos de la víctima, generalmente cuando la víctima está sentada y distraída. Los cordones también pueden atarse a cualquier objeto cercano -lo que puede causar un notable percance en el momento en que la víctima se levante, sobre todo si se la anima a correr-, o pueden simplemente cortarse.[1] Otra forma muy común de causar una caída es con la zancadilla, especialmente eficaz cuando la víctima se desplaza rápidamente.
BOLITAS DE PAPEL
Una bolita de papel mascado puede impactar en la víctima con fuerza, especialmente si es arrojado a través del tubo vacío de un bolígrafo. La eficacia de estas bolitas se ve disminuida por el característico sonido del proyectil al abandonar el canuto, que suele delatar su procedencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario